NUESTRO TRABAJO
El Observatorio desarrolla programas de educación y recomendaciones de política interna y externa, basados en evidencia, sobre medidas preventivas y de mitigación frente a contenidos nocivos en línea con un enfoque feminista. Hemos realizado estudios, talleres y recomendaciones de políticas en Chile, donde ya estamos en la etapa de incidencia, y nuestros próximos países objetivo son Ucrania, Colombia, Nigeria, México, Brasil, Perú y Filipinas. El proyecto se enfoca en la desinformación contra las mujeres que participan en la vida pública, particularmente representantes de poblaciones indígenas, activistas de la comunidad LGBTIQ+ y defensoras de derechos humanos.
OBJETIVOS
General: El Observatorio de Mujeres contra la Desinformación busca promover cambios en los sistemas democráticos y digitales para apoyar la participación de mujeres libres de violencia en los procesos de toma de decisiones, incluida la participación en la resolución de conflictos.
Específicos:
- Colocar en la agenda pública el problema de las campañas de desinformación contra las mujeres en política.
- Prevenir la normalización de la violencia de género en línea como práctica política.
- Promover cambios en políticas públicas para salvaguardar la participación de mujeres.
PAÍSES OBJETIVO
PARTICIPANTES
Mujeres participando en política, incluyendo
- Miembros de poblaciones indígenas,
- Mujeres afrodescendientes,
- Mujeres migrantes,
- Mujeres transgénero,
- Mujeres miembros de la comunidad LGBTIQ+,
- Mujeres que se postulan para cargos públicos por primera vez,
- Mujeres que buscan la reelección,
- Mujeres de diferentes niveles socioeconómicos,
- Activistas,
- Voluntarias, etc.
IMPORTANCIA DEL OBSERVATORIO

Las campañas de desinformación marcan el debate público.

Desinformación y las Fake News provocan una baja participación de mujeres en política.

La mayoría de estudios se han llevado a cabo en Estados Unidos, Canadá y Europa.

No existen datos respecto de el número de mujeres que se retiran de procesos de toma de decisiones debido a la desinformación.

No existen datos respecto de la cantidad de mujeres en situación de vulnerabilidad participan en procesos electorales.